LA CIUDAD Y SU ARTISTA

Es la única manera de poder mirar un mundo que era de un tiempo que ya se fue. De mano de su pincel tantas vidas de una paleta nacidas; tanto, tanto alrededor de una época perdida que por él no se perdió. Hoy se lo quieren llevar de su casa. ¿Llevar dónde? a donde sea, es igual, que nunca será lo mismo para tantos que lo aman y entregan tanto cariño a través d sus miradas. Se va un pedazo d historia por la fuerza del poder, la fuerza más poderosa y más fría y sin memoria que en el mundo puede haber. Que vengan y se lo lleven, que lo que jamás podrán quitarnos es lo que tiene la gente de una ciudad que junto a su artista siente que es, como él, universal.

JUANMA Y LA SEMANA SANTA

Al despertarme esta nueva mañana
lo primero que hago
es mirar a través de la ventana
a esta Sevilla en domingo de ramos.
Cubre el cielo una manta
de algodones morados
y unas gotas escapan;
tenues hilos dorados,
como lágrimas blancas
recorriendo la cera
de la virgen de un paso.
Ya muy pronto, a las calles
los aromas saldrán
que desde un año antes
esperó la ciudad.
Todos los sevillanos
con sus ropas de sueños
todo el día soñando;
personajes de un cuento
que se cuenta rezando.
Entre los azahares,
primavera de flor,
las saetas se abren
de balcón en balcón.
Un sentir que recorre
cada fibra del ser
de Sevilla. La noche
ya llegó. Vine a ver
todas las procesiones
a sus templos volver.
Yo también me recojo,
al fin el pensamiento
y este poema que es sólo
de este día recuerdos.
Miro al cielo. Las nubes
ya no siguen llorando;
unas manchas azules
veo abrirse a pedazos.
Ya con prisa, termino;
llego al verso final,
que salgo este domingo
de ramos por Sevilla a pasear.

Juan Manuel O´shee

JUANMA Y LOS ACCIDENTES DE TRABAJO

De la peligrosidad.
Tanto trabajo en precario.
Por buscar seguridad
muchas veces arriesgamos
la propia. La libertad
debe ser en el trabajo
primera necesidad;
cumplir medidas y horarios
una regla principal
que patronos y empleados
nunca lleguen a olvidar.
Cuando se tienen detrás
a seres a los que amamos
y debemos de cuidar,
a veces sacrificamos
por ellos la obligación
que tenemos de cuidarnos
y al peligro lo dejamos
junto a nuestra ocupación
y junto a él laboramos,
junto al llanto y al dolor.
De la peligrosidad.
Tanto trabajo en precario.
El derecho a trabajar
y el derecho a que volvamos
siempre a casa al terminar.

Juan Manuel O´shee

Juanma se nos casa !por fin!

Vamos, vamos a casarnos,
y cuanto antes mejor;
tenemos que enamorarnos,
que la vida es el amor.
No importa si no pensamos
a veces lo que será
vivir nuestro tiempo al lado
de otro ser, si al despertar
el resto de nuestros días
no nos llegará a tapar
a la aurora una sonrisa
que no sepamos mirar.
El tiempo ¿es tan largo el tiempo
como largo es el amor?
¿Se pueden los sentimientos
ajar en el corazón?
Pensar. En el pensamiento
hay un poquito de todo
lo que el hombre lleva dentro.
¡Tan hermoso es el amor!
¡tan puro, tan verdadero!
tan amo de la razón,
quien nunca ha de tener dueño.

Juan Manuel O´shee

JUANMA UN RINCONCITO PARA VIVIR

Para todos un lugar,
un pedazo, sea el que sea,
pero de tu propiedad.
No valen frases o lemas
con ritmo y sonoridad;
de palabras y promesas
las calles llenas están,
mil bolsillos de profetas
repletos a reventar.
Los ingresos del trabajo
de muchos apenas da
para ellos; el destajo
es como una flor que, al cabo,
se acaba por marchitar.
Todo hombre o mujer honrado,
como dicta el razonar
natural del ser humano,
tiene un derecho sagrado,
que es el poder habitar
con los suyos un lugar
y habitarlo dignamente,
y el mundo y la sociedad
le deben de procurar
un bien que el hombre merece
para poderse llamar
hombre y como tal vivir,
que no es persona el que va
por la vida sin sentir
que tan siquiera posea
techo bajo el que soñar
y al día, cuando amanezca,
ver sobre él al despertar.

Juan Manuel O´shee

JUANMA TIENE MASCOTA

A veces, soledad,
te vienes y te quedas
a nuestro lado. No quieres marchar
por más que la cabeza
te trata de alejar.
Nos metes tu tristeza
dentro de la razón,
se te habla y no contestas;
no existe maldición
más cruel que las preguntas sin respuestas
si quien pregunta es nuestro corazón.
Y empiezas a buscar,
miras alrededor
a alguien que te pueda consolar,
y a veces, aunque hay gente, nadie está;
tú solo y tu dolor.
Y una respiración
te llega, y un mirar
que siempre va de frente, enfrente está,
y los ojos te llena a rebosar
de afecto y comprensión,
y hablan tus manos al acariciar,
y preguntas y le oyes contestar,
y ves como la soledad marchó.

JUAN MANUEL O´SHEE

Juanma y "Los mayores"

En la vida, de todo lo vivido
vamos haciendo
nuestra historia, páginas de un libro
que va escribiendo
en el papel del que está hecho el camino
el sentimiento.
Aunque no se termina hasta que dejas
un día de escribir,
a cada paso que al final te acercas
vas teniendo más cosas que decir
y ansias más que te lean,
y piensas en servir
a aquellos que te siguen y que tengan
algo útil de ti;
pero nos alejamos
los demás del saber
que se halla guardado
en esos largos libros, y después,
al escribir el propio, recordamos
aquellos que no quisimos leer,
los libros de las vidas
que fueron una vez;
palabras nunca escritas
que acaban con la gran sabiduría
de vivir aún la vida en la vejez.

JUAN MANUEL O´SHEE

JUANMA Y LA TRANSEXUALIDAD

Tantos seres que vivimos
mezclados en este mundo.
Tantos seres que sentimos,
que gozamos, que sufrimos
y a veces, aunque tan juntos,
tan extraños y distintos.
En ocasiones, tendemos
a juzgar a las personas
tan sólo por lo que vemos
de las mismas, por sus hechos;
las ponemos en las hormas
que en nuestro pensar tenemos
y si les falta o les sobra
para nada las queremos.
Lo que cada sentir ama
es del vivir la razón.
No juzguemos las palabras
dichas por el corazón.

Juan Manuel O´shee

JUANMA Y LA LEY ANTITABACO

Todo lo que se puede comprender
y podemos pensarlo
y al pensarlo entender,
podemos aceptarlo
y decidir al respecto después.
Si acaso lo juzgamos
corremos el peligro de caer
en el error de odiarlo,
ese riesgo que corre siempre el juez,
que entre quien juzga y quien es juzgado
la línea divisoria es de papel.
¿Qué es lo bueno o lo malo?
¿qué se debe o no hacer?
¿qué es dañino o es sano
para quien no sea usted?.
Cada cual que decida
en sí mismo qué quiere para él;
cada uno que elija
el camino que quiere recorrer
y que lo ande sereno;
sea el que sea, que lo ande en libertad,
sin escuchar murmullos a lo lejos
y a la vez sin tampoco murmurar.